martes, 5 de julio de 2011

Desde Asia y con amor: Volumen 1 (Cannes)


Aparte de Hollywood, Bollywood y la dependencia de Canal Plus llamada Francia, hay una cuarta industria cinematográfica plenamente dicha, la cual está constituida por el triángulo de Corea del Sur, Japón y Hong Kong, aunque a veces se le suman los chinos de China (no los de Hong Kong) y los energúmenos cinematográficos de los tailandeses.
Ahora cabría decir dos cosas casi etimológicas que parten de un criterio personal. La primera es que realmente una industria es plena cuando hace filmes y pelis para abastecerse a sí misma, por lo tanto debe grabar todos los géneros, crear géneros propios y que sus salas estén constantemente proyectando con filmes nacionales. La segunda sería decir que no es una trampa poner a varios países bajo una industria, pero sucede que, pese a que tienen diferencias y estilos propios, tienen un sistema de producción casi igual. Incluso hay varios ejemplos de colaboración entre ellos: Three extremes[1], Three[2] y la trilogía de la sociedad de las tríadas de Miike, la trilogía de Dead or Alive del mismo Miike entre muchos otros ejemplos.
Ya aclarado y presentado, pasaré a escribir la presente columna que está dirigida a difundir películas asiáticas para que ustedes se quejen, hagan marchas y tomen rehenes para que tales filmes se exhiban en el circuito de cines. En caso de ser menos belicosos, pueden conseguirse los filmes por ustedes ya saben qué vías.
Sin más dilaciones, dos filmes que se presentaron en Cannes y que aquí no van a traer porque hay una peli de Adrián Suar en la cual se transforma en zapato.

Hara Kiri: Death of a Samurai[3]

De la selección oficial de Cannes (pero sin premios) llega el remake de un filme clásico de Samuráis dentro del propio subgénero de Samuráis, y con un atractivo llamado Takashi Miike. Miike es el director japonés más visto de Japón y posiblemente de los más vistos en Japón. También debe ser de los más prolíficos ya que debe grabar un promedio de tres películas por año, pero especialmente es al tipo que se tiene que ver para entender el cine nipón.  Si usted era habitual de ir a ver el trasnoche Pocitos posiblemente recuerde Dollbox, el corto escalofriante dentro de Three extremes; la oda al sadomasoquismo Yakuza llamada Ichi the Killer[4]; y la perturbadora Audition[5]. El señor Miike no solo se caracteriza por su violencia y bestialidad, sino que se caracteriza por hacer cualquier cosa. A modo de muestra: comedias de enredos, artes marciales, westerns, musicales, infantiles, zombies, teen slashers, adaptaciones de videojuegos, series televisivas policiacas, Yakuzas, dramas existencialistas, etc. 
Si bien Hara Kiri no se presenta como parte del lado extremo de Miike (el lado más atractivo), tiene una particularidad que marca bien al director. El tipo se presentó y quedó en la muestra oficial de Cannes con una cosa grabada en 3D.


 Arirang[6]

Si Miike es el ejemplo del director asiático amado en Japón y sin tanto reconocimiento mundial, Kim Ki Duk es el ejemplo paradigmático del director consagrado mundialmente sin tanto reconocimiento en su Corea natal. Incluso después de su anterior filme, Dream[7], el propio Kim declaró que ya no iba a hacer más filmes debido a que se estaba quedando sin plata.
Arirang que se presentó en “Un certain regard” de Cannes y lo ganó. Es el filme posterior al anuncio de quedarse sin dinero y en parte demuestra esa ausencia de efectivo ya que es guionada, dirigida, fotografiada, editada y actuada por el mismo Kim Ki Duk.
Una película superpersonal que pretende rondar la colina de la vida y el suicidio. Entra demasiado bien en el estilo de Kim plagado de silencios, disquisiciones metafísicas y un formato más similar a una Tesis que a una novela. Cabe decir que no creo que sea una película adecuada para los ansiosos; tan solo miren el trailer.




[1] CHAN Fruit, PARK Chan Wook, MIIKE Takashi (2004) Saam gaang yi
[2] CHAN Peter, KIM JI Woon, NIMIBUTR Nonzee (2002) Saam Gaang
[3] MIIKE Takashi (2011) Ichimei
[4] MIIKE Takashi (2001) Koroshiya 1
[5] MIIKE Takashi (1999) Ôdishon
[6] KIM Ki Duk (2011) Arirang
[7] KIM Ki Duk (2008) Bi-mong  


3 comentarios:

Lourdes Nievas dijo...

Me encantó esta columna y eso que no soy experta en la materia.
Me encantaría ver mas de Miike, solo vi Korosiya.

Mar dijo...

¡Quiero más columnas de cine intangible!

También me interesó eso del teen slasher japonés.

maite dijo...

Estimado,interesante leerlo! y me dio ganas de ver la de Kim Ki Duk... veremos si lo consigo, junto a otras de sus producciones mediante "ustedes ya saben qué vías",mandaré dvds a cambio...